Neuropatía en Monterrey

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¿Cuál es el tratamiento de la neuropatía diabética?

Cuando se realiza el diagnóstico de neuropatía diabética, el primer paso en el tratamiento debe ser el lograr un control estricto de los niveles de glucosa, ya que, de otro modo, difícilmente se podrá controlar la neuropatía y en ciertas ocasiones incluso puede llegar a progresar.

Los cambios en el estilo de vida también son de crucial importancia, como:

  • La dieta
  • El uso de calzado especializado
  • El cuidado de los pies haciendo énfasis en cuidar las heridas o lesiones que se presenten

El tratamiento farmacológico de la neuropatía diabética suele incluir analgésicos convencionales, aunque, de nueva cuenta, en algunos pacientes suelen tener poca o nula respuesta.

Por tal motivo, el especialista puede hacer uso de algunos fármacos que suelen ser utilizados para otras enfermedades pero que debido a su propiedades, suelen modular las alteraciones de los nervios periféricos y por ende controlar el dolor.

Algunos ejemplos de estos fármacos son los antidepresivos o los medicamentos antiepilépticos, además, en casos necesarios, suelen utilizarse medicamentos derivados de los opioides para el control del dolor intenso. 

Si después de varias semanas con este tratamiento sigue habiendo muchas molestias habrá que considerar otras terapias alternativas como:

  • Estimulación magnética transcraneal para el manejo de dolor crónico
  • Tratamiento tópico con capsaicina
  • Parches de lidocaína
  • Estimulación nerviosa eléctrica.

Sí se puede vivir sin dolor, acude con el especialista para una evaluación completa y explorar las alternativas terapéuticas que puede ofrecerte.

¿Qué es la neuropatía diabética?

Cuando los niveles de glucosa (llamada erróneamente como azúcar) se mantienen fuera de los límites normales en la sangre por mucho tiempo, se empiezan a presentar complicaciones a nivel de los vasos sanguíneos llamadas complicaciones microvasculares (vasos sanguíneos pequeños) y macrovasculares (vasos sanguíneos grandes).

Los pacientes con diabetes que no logran un adecuado control de los niveles de glucosa empiezan primero a presentar alteraciones microvasculares, ya que los vasos sanguíneos pequeños son más susceptibles. Estas alteraciones se forman debido a una inflamación crónica de los vasos, aterosclerosis y otros daños a nivel molecular.

Entre las principales alteraciones microvasculares se encuentran enfermedad renal (nefropatía diabética), enfermedad a nivel de la retina (retinopatía diabética) y enfermedades de los nervios periféricos (neuropatía diabética).

Los nervios periféricos son todas aquellas estructuras que nacen de la médula espinal y tienen como función recibir y enviar información hacia el cerebro.

Los nervios periféricos nos permiten percibir la posición en la que nos encontramos, por ejemplo, saber cuando tenemos las piernas cruzadas o cuando estamos apoyando uno u otro pie, propiedad que se llama propiocepción, es decir, el conocimiento de lo propio.

Otras de las tareas de los nervios periféricos son el percibir la temperatura (tanto el frío como el calor), la vibración, las sensaciones dolorosas y los reflejos que resultan de las mismas, por ejemplo, el reflejo de retirar la mano de una superficie caliente o fría.

La fuerza muscular de nuestras extremidades también está controlada por los nervios periféricos, además de lograr realizar movimientos finos como la escritura o abotonarse la camisa.

Se estima que el 50% de las personas con diabetes mellitus (tanto tipo 1 como tipo 2) van a llegar a desarrollar neuropatía diabética en algún punto de sus vidas.

El riesgo de desarrollarla aumenta con el tiempo de duración con diabetes, especialmente si se tienen más de 25 años con la enfermedad, siendo otro importante factor de riesgo el tener un inadecuado control de la enfermedad, presentando constantemente cifras elevadas de glucosa.

Manifestaciones de la neuropatía diabética

La neuropatía diabética es una patología progresiva, es decir, que se instaura a lo largo del tiempo y no de un momento para otro.

Durante las etapas iniciales suele ser asintomática, los pacientes no se dan cuenta de que sus nervios están sufriendo, la única manifestación hasta cierto punto notable, son los niveles por arriba de la normalidad de la glucosa.

Cuando la neuropatía diabética se vuelve evidente los síntomas suelen ser molestos y difíciles de tratar.

  • El dolor es por mucho el síntoma que más afecta a los pacientes. y uno de los principales motivos de que los pacientes acudan con el especialista o a las clínicas de manejo del dolor.
  • Suele tratarse de un dolor a nivel de las manos o pies, por lo que se llama a veces “neuropatía en guante y calcetín”.
  • El dolor es de tipo sordo, es decir, no suele identificarse un sitio exacto de donde proviene, es sostenido, a veces intenso y en muchas ocasiones no suele disminuir con los analgésicos convencionales.
  • En algunas ocasiones el dolor suele manifestarse como sensación de descargas eléctricas, punzadas, hormigueo o piquetes.
  • Otros pacientes lo suelen referir como sensaciones de quemaduras.
  • La neuropatía diabética suele asociarse también a pérdida de la sensibilidad, por lo que algunos pacientes no suelen percatarse de heridas que se hacen, y esto, sumado a la mala circulación por afectación de la microvasculatura, puede generar infecciones graves.
  • Por último, puede afectarse también la fuerza muscular y los reflejos, produciendo debilidad o caídas.

¿Cuándo sospechar de neuropatía diabética?

La sospecha de que un paciente puede padecer de neuropatía diabética inicia cuando presenta los síntomas previamente descritos en un paciente con mal apego a su tratamiento de diabetes o con niveles elevados de glucosa a pesar de presentar un buen apego.

El diagnóstico se realiza mediante una exploración neurológica integral en el que se evalúa la sensibilidad, la fuerza, la propiocepción y la vibración. El especialista puede utilizar herramientas como el monofilamento o el diapasón.

Por último, suelen ser necesarios estudios especializados como las velocidades de conducción nerviosa o la electromiografía, que estudian la integridad de los músculos y de las señales nerviosas que envían los nervios periféricos.

Factores de riesgo para neuropatía diabética

Para ello hay que reconocer los factores de riesgo que predisponen a la aparición de esta neuropatía, tales como:

  • Una larga duración de la enfermedad
  • Altos niveles de hemoglobina glucosilada
  • Hipertensión
  • Obesidad
  • Dislipidemia
  • Tabaquismo
  • Alcoholismo crónico
  • Estatura alta
  • Edad avanzada.